viernes, 28 de diciembre de 2012

MIS DESEOS A MIS QUERIDOS LECTORES PARA EL 2013


Les deseo a todos mis queridos lectores que el año entrante 2013 sea una verdadera luminosidad en  sus vidas y en sus mentes y que la claridad para ver la realidad sea lo más prioritario de todo. Les deseo la quietud de la mente. 

domingo, 16 de diciembre de 2012

LA LUCHA DE CLASES


La historia de la libertad es la de la lucha por limitar el poder del gobierno.”
Thomas Woodrow Wilson (1856 – 1924), 28º Presidente de los Estados Unidos.


La lucha de clases es un mito lo que existe es la lucha por las libertades entre el colectivo y los que gobiernan. De una u otra forma este principio siempre se ha cumplido, con ciertas y pequeñas excepciones (grupos indígenas, tibetanos y otros exóticos).

Por supuesto que esta lucha entre la sociedad y el gobierno dependerá del nivel de concientización que tenga aquella; si uno no está consciente de que alguien está abusando de uno, simplemente no existirá lucha; nadie puede luchar por algo que no conoce.

La lucha de clases no es entre el rico y el pobre. Nadie va por las calles a atacar a alguien que tenga una posición económica superior. El malestar o bienestar de la sociedad es responsabilidad exclusiva de la elite que gobierna, simplificando: de los políticos.

Yo le doy las gracias a quien me da el empleo que me permite tener el dinero para vivir; yo no lucho contra él; él defiende sus intereses y yo los míos y, quizás lleguemos a un acuerdo.

Desde tiempos remotos la lucha siempre ha sido entre los que gobiernan y el colectivo.

En los tiempos más o menos modernos, los poderes económicos siempre han utilizado a los políticos como medios para lograr sus metas (son sus títeres).

En la época de los faraones todo era muy simple: el faraón y los esclavos; no había lucha porque no habían clases sociales ni tampoco conciencia de los esclavos de los abusos que les hacían; ellos aceptaban su condición tranquilamente. Sin embargo la condición esencial era el gobernante faraón y el esclavo gobernado. La verdad es que en aquella época no había conciencia del derecho (natural)que tiene un ser humano, igual que ahora.

Acercando el tiempo un poco más hacia ahora, existía la época feudal; por supuesto, en sus comienzos solo había feudos (señores feudales) sin reyes. Los siervos de la gleba dependían del señor feudal; la verdadera lucha por la libertad era contra el señor feudal pero como nadie tenía conciencia de sus derechos no había lucha y todo seguía igual; todos le daban las gracias al señor feudal por permitirle estar en su feudo y no ser arrasados por los bestias barbaros.

No quiero exagerar la simplificación, reconozco que en todas las épocas siempre ha existido una estructura social piramidal, en mayor o menor grado pero la tesis que sostengo es que la lucha por la libertad es contra el que tiene el poder y gobierna y no entre las clases sociales.

Ha habido unos cuantos hitos históricos en cuanto a la organización social se refiere. La era de los griegos, la de los romanos y muchas otras.

De unos cientos de años hacia acá ha habido un ingrediente adicional que no existía en tiempos primigenios: la alianza del poder del gobierno con los poderes económicos. Dicho de otra manera, desde que el dinero entro en el juego de la vida se aliaron los gobernantes y los que detentan (ver RAE) el dinero. Hoy en día es simplemente una ley sin excepciones.

Las crisis económicas no son producto de lucha de clases; pienso que son el producto de la irresponsabilidad y mala fe de los gobernantes que se han aliado con los poderosos del dinero.

La lucha de clases no es entre el ciudadano común y el banquero o la transnacional.

La lucha de clases es entre la sociedad y el gobernante que debe y está obligado a poner orden, justicia y armonía. Lamentablemente, siempre es una tragedia obligar a un lobo a cuidar ovejas; y el lobo llega a través de las votaciones electorales. La democracia tiene un altísimo ingrediente de falacia y utopía; la democracia es un ideal y la práctica de la realidad es otra.

La idea, símbolo o imagen de democracia es la excusa perfecta para que el estado domine a la sociedad.  En la práctica, la democracia es muy imperfecta pero es perfectible y es el mejor de los malos sistemas de gobierno.

Si no me equivoco, el que invento la idea de lucha de clases fue Carl Marx y pienso, que se equivoco brutalmente y  quizás, de mala fe.

No han faltado todos aquellos que aprovechando la equívoca y absurda idea de Marx han realizado y realizan actualmente promesas y demagogias para obtener poder y dinero y, abusar de la sociedad. Cuando llegan al poder, se presenta de nuevo la lucha por la libertad entre el colectivo y el gobierno; si no hay conciencia no hay lucha.

La lucha de clases en la actualidad esta apoyada en el ideal llamado democracia.

La democracia le permite a los políticos ofrecer mediante el discurso populista, esperanzas y hermosas ofertas al colectivo pero cuando llegan al poder solo se arriman y favorecen a los poderosos del dinero (caso España, por ejemplo o muchos países bananeros). La ayuda hacia la banca es francamente grotesca en España; el desahucio en España y USA es francamente abominable.

domingo, 2 de diciembre de 2012

DEBEMOS DESHUMANIZARNOS


Dedicado a esas  extrañas criaturas llamadas seres humanos que nos creemos las divinidades del universo.

Cuando se quieren expresar las máximas bondades, cualidades y virtudes existentes se utilizan expresiones tales como: humanizar, humanización o al contrario: que poco humano es fulano de tal y tantas otras. Inclusive, en muchas universidades del mundo existen las Facultades de Humanidades, dedicadas al estudio de lo humano con un sentido radical hacia la orientación positiva.

En infinitas ocasiones escuchamos la expresión: fulano de tal es inhumano, tal acción es inhumana.

Existen infinidad de situaciones negativas del acontecer diario en las que se insiste en recapacitar y retornar a nuestro origen humano, por lo cual se da por sentado que la palabra humano es sinónimo de lo bueno, del bien, de la ética, la solidaridad, lo excelso y paremos de contar.

Jamás vemos lo que realmente somos: nuestra sombra y oscuridad interna; nuestros vicios, malicias, hipocresías, mentiras e infinidad de palabras de sentido destructivo que aparecen en la RAE y que nos parecen ajenas a nuestra naturaleza.

La guerra es inhumana, hacer sufrir al prójimo es inhumano, explotar al empleado es inhumano, los bancos que prestan dinero para la compra de armas son inhumanos, la política de austeridad de España es inhumana, lo desahucios son inhumanos, los abusos de los banqueros son inhumanos, pegarle a la esposa o a los hijos es inhumano, maltratar animales es inhumano, ir de cacería y asesinar a un elefante es inhumano, es inhumano cobrar impuestos desmedidos a las clases económicas populares y no cobrarle lo que es debido a las transnacionales, las atrocidades que hacen los dictadores son inhumanas, que los políticos prometan un bienestar sostenido y que luego ocurra lo contrario es inhumano, las depravaciones sexuales que hacen algunos sacerdotes son inhumanas, los tiranos bananeros de áfrica y América que prostituyen y esclavizan a sus pueblos son inhumanos; ese es el acontecer diario de la humanidad.

¿Cuánto más se debe escribir para describir lo que es inhumano?; sin embargo esa es la realidad que vivimos y que no queremos ver; o mejor dicho, la gran confusión que tenemos entre la cruda y cruel realidad existente y nuestra idealización sublime de lo humano.

En mayor o menor grado todos cometemos desatinos hacia la igualdad, la justicia, la agresión, el maltrato de todo tipo hacia humanos, animales y la naturaleza, moralidad, indolencia y muchas más que califican de actos inhumanos. ¿Se  puede ser humano e inhumano al mismo tiempo?. O es una o la otra, porque ambas al mismo tiempo son contradictorias.

¿Existe realmente lo humanitario cuando el ser humano es egoísta en su esencia?; egoísta implica que yo soy todo lo importante y el resto que me rodea es secundario y ajeno a mí ser. Solicito que alguien me describa la parte “positiva” de los seres humanos; expresado en otros términos y a manera de ejemplo: ¿Dónde está la verdadera solidaridad, ayuda y amor hacia el prójimo que no implique un sentido utilitario. Pondré un ejemplo algo fuerte: yo amo y ayudo al prójimo porque en los mas interno de mi ser deseo un buen lugar en el mas allá; quiere decir, que mi interés en ayudar a los demás es para ganarme el cielo: sentido utilitario para mí. Infinidad de actividades de apariencia altruista esconden un profundo egoísmo del “ser humano”.

Pienso que el mundo actual no es más que un océano de injusticias, mentiras e hipocresías de todos nosotros.

La ley natural humana es: Los mas pillos son los que triunfan y viven como reyes y, son precisamente ellos los que nos hablan de moralidad y principios; para colmo, ellos dictan y definen la moralidad, ética, el bien, el mal y en fin esa cantidad de basuras ideológicas para los débiles mentales. ¿Soy nihilista?, creo que no; me atrae observar solamente la realidad en la cual vivimos.

Me niego a aceptar el principio Darwiniano aplicado a la raza humana; debemos superar esa ley.

Debemos reconocer que nuestra naturaleza real y práctica es muy defectuosa en comparación a la idealización que tenemos del humanismo; me parece muy repugnante la figura igualatoria de lo excelso y supremo con la palabra humano y sus derivaciones gramaticales.

Propongo un cambio radical de paradigmas, en lo que al término humano, humanismo y humanitario se refiere.

Lo que propongo es cambiar radicalmente los términos de definición que se han utilizado durante siglos: deshumanizarse debe ser escalar a niveles superiores y hacia lo místico; el ser humano como criatura llena de vicios y defectos, debe liberarse de todo ello. Librarnos del ego, seria deshumanizarnos y escalar hacia estados superiores de conciencia.

Si lográramos deshumanizarnos  todos seriamos iguales, no habría vanidad ni envidia, todos nos ayudaríamos, habría verdadera solidaridad, no habría desahucios, existiría un país con estado de permanente bienestar, habría seguridad social y sanitaria para todos “permanentemente”, no existirían asociaciones perversas entre banqueros y políticos populistas, no existirían políticos engañando a los votantes con ofertas falsas para luego ayudar a sus socios mafiosos, no existirían los mega multimillonarios ni los que no tienen ni que comer, no tendríamos que trabajar como las hormigas para vivir al margen.

En un mundo deshumanizado sería inconcebible que el 90 % del dinero y riquezas del mundo estuviese en manos de un 4 % de la población.

En un mundo deshumanizado no existiría la explotación de unos contra otros, ni luchas, ni guerras, ni intrigas, ni hipócritas políticas diplomáticas entre países.

Lo que sucede y siempre ha sucedido es que idealizamos el término humano; es lo que deseamos que sea pero que en la realidad no lo es ni lo somos.

Lo humano deberíamos entenderlo de ahora en adelante como sinónimo de anti virtudes, anti valores y desatinos morales y muchas veces de acciones aberradas.

 Para poder avanzar hacia etapas superiores debemos desprendernos de nuestra propensión antropomórfica la cual debe sucumbir. Por cierto, comentando sobre antropomorfismo: jamas he podido entender la expresión de que "el hombre fue creado a imagen y semejanza de dios"; siempre he pensado que es al revés.

Somos infinitamente, egoístas, vanidosos, envidiosos y ambiciosos y es por ello que el medio ambiente, flora y fauna, se están destruyendo y extinguiendo, al igual que nosotros mismos.

El ser humano tiene la gran peculiaridad que vive de ideales; la humanización y todos los términos similares son una idealización de lo que queremos y deseamos ser  pero no es la realidad ni la verdad viviente.

Hagamos de los ideales la realidad: DEBEMOS DESHUMANIZARNOS.