¿Qué diferencia conductual generalizada en los individuos
distinguiría Freud entre su época y la actual?
Este planteamiento es bastante complejo por cuanto Freud tendría
que asimilar y comprender primeramente nuestra cultura, lo cual le llevaría algún
tiempo y quizás, si naciera en esta época sus teorías serian muy diferentes
debido al entorno cultural actual.
Para poder hacer este ejercicio de imaginación debemos
comenzar por visualizar la época y el entorno en que Freud vivía; luego, destacar
lo resaltante de nuestra época.
Es evidente que sin necesidad de hacer este análisis sabemos
en este momento de una serie de factores esenciales al ser humano de todas las épocas;
el ego siempre ha sido ego y es simplemente una maraña de recuerdos y
conocimientos que se encuentran dentro de la mente humana y que tienden
fuertemente a dividir y separar al individuo de todo lo demás que le rodea;
inclusive, tiende a dividirlo mentalmente a sí mismo. Una vez que esa
información está en la mente proceden velozmente una serie de procesos entre
los cuales el más importante es la comparación.
Actualmente existen infinidad de artilugios técnicos,
infinidad de conceptos financieros y bancarios, infinidad de medios de inter
relación social, infinidad de medios de comunicación social y una inmensidad de
ofertas de consumismo innecesario; además, existe hoy en día una propuesta democrática
desconocida en la época de Freud, un populismo político impensable en aquel
entonces y una explosión demográfica que no era imaginable.
La época de Freud era calmada, transcurría todo con lentitud
y había tiempo para todo: para tomar té, para conversar, para caminar hablando
simpleces y hasta para ver como caían los copos de nieve. El entorno de Freud incluía
el vals que era totalmente diferente a la música actual.
Hoy en día, no hay tiempo para nada y la estamos pagando muy
caro; un individuo vale por la rentabilidad que produce en el menor tiempo
posible. Si lo haces bien en menos tiempo tú vales más que aquel que hace lo
mismo en más tiempo; este simple hecho tiene una enorme repercusión en cuanto a
esfuerzo y competencia se refiere. En estos tiempo, el individuo se va
convirtiendo en una cifra y va perdiendo cada vez más su identidad y llegara el
momento en el cual le sea implantado un chip para convertirlo finalmente en una
cosa.
Como consecuencia de estas tensiones se produce la ansiedad
y finalmente se manifiesta como neurosis. La neurosis gira alrededor del temor
y los mecanismos de defensa; es obvio que lo que consideramos neurosis en una
cultura determinada no lo sea para otra. Freud menospreciaba la influencia de
los factores culturales llegando algunas veces a generalizaciones erróneas.
El individuo neurótico tiene rigidez en sus relaciones y
manifiesta además discrepancias entre sus capacidades y sus realizaciones.
Se podría afirmar con poco margen de error que la neurosis
es la enfermedad de nuestra era y además, está ampliamente globalizada.